Dátiles frescos para imaginarse Oriente

Hoy he tenido la oportunidad de probar dátiles frescos con menos de 24 horas desde su recogida en Elche a la tienda. Una fruta muy desconocida para las mesas españolas aunque seamos productores de dátiles en la zona del sur y oeste español. 

En Casa Perris de Barcelona hoy daban a probar un dátil fresco por cliente pues su precio es caro, sobre los 28 euros el kilo. Puedo asegurar que merece la ocasión. Su dulzura es diferente, pero sobre todo su suavidad, ese meloso distinto al dátil seco, convierten al dátil fresco en un producto ancestral y a la vez ideal para rellenar de infinidad de cosas que nuestra nueva cocina se atreva a imaginar. Hay que tener en cuenta que frescos son como poco del doble de tamaño del dátil seco mientras que el hueso es igual. Al abrir el dátil fresco y quitar el hueso, queda un producto perfecto para embutir queso, embutido o cualquier otro "invento" que imaginemos. Efectivamente, no es fácil encontrar dátiles frescos, ese es el problema.

La imagen es del blog: cocinayaficiones.com