Plancha o barbacoa para una comida familiar


Es muy habitual en España y en los países iberoamericanos (incluso en algunos parques de barrio en los EEUU) hacer plancha o barbacoa cuando se juntan un grupo de amigos y amigas en familia a comer o cenar en un sitio abierto. Este tipo de cocción otorga un sabor diferente a las carnes y verduras, por su forma de cocer el producto.

Tan solo es necesario unos buenos embutidos y carnes variadas, algunas verduras de acompañamiento y unas salsas variadas para quien desee ampliar los sabores finales. Y un maestro en el arte de saber dar la temperatura en la plancha o en la barbacoa, algo más complicada en esta segunda opción.

Calabacines, cebolla, pimientos, espárragos, tomates con un poco de aceite de oliva y sal pueden ser el inicio de la plancha o barbacoa. Luego unos chorizos, longanizas, morcillas, pinchos de diversa composición, pancetas o incluso caracoles, puedes ser el inicio de una continuación con carnes más potentes, bien chuletones o lomos de vaca o costillas de cerdo o ternasco.

Como salsas, podemos poner sobre la mesa y nunca sobre las carnes, desde la más común de un ali oli falso, a un chimichurri o alguna salsa ligeramente picante. Y siempre. eso sí, regado todo con un buen vino tinto, huyendo de sangrías o de vinos “lavados”. La temperatura de servicio es fundamental, hay que servir recién hecho, nada de dejar enfriar, pues es un crimen contra la gastronomía al exterior.