Quesos de Holanda, picantes y de colores

En Holanda la fabricación del queso es un arte, como sucede en Suiza y Francia o incluso en Bélgica. Numerosísimos quesos diferentes de sabor, de textura, de mezclas, para todos los paladares. Esos dos quesos son de Holanda, ambos picantes. El más rojo con más pimentón picante en su composición y el otro con mezcla de queso normal, más algo de queso de pesto y queso con pimentón, poco mezclados los tres en fabricación para formar esa sensación de mármol. Ambos quesos de leche de vaca y no muy caros de precio. Personalmente me quedo con el rojo, pues el picante con ligeros toques ahumados encaja perfectamente con el queso, junto a unos buenos vinos tintos de reserva o incluso algo dulces.

En Holanda el queso se toma de muy diversas formas, acompañado de algunos componentes que le ofrecen sabores curiosos. Es normal que encima de un pequeño trozo de queso te pongan una gota de mostaza, o de miel, o de mermelada de grosellas. O incluso que la lámina de queso se ponga encima de una rodaja de tomate y todo se meta al horno unos segundos para que el queso se funda.