Es posible innovar en la cocina, y no solo en los gastronómicos concursos de televisión ni en los restaurantes de 200 euros el cubierto (o más) sino en las cafeterías y restaurante que cuidan al cliente y se ponen a investigar platos diferentes.
Os dejo este ejemplo:
Gazpacho con langostinos
Pulpo a la gallega (pero con puré de patata en la base en vez de cachelos a rodajas)
Fish and Chips “neocañí”
Perrito Caliente “Estado P.” que os juro que no sé de qué va
Rabo de toro a la japonesa
Alcachofas fritas con soja y miel (la berenjena también funciona igual)
Es posible hacerlos en casa ¿no?
