Cuando buscamos nuevos sabores a veces antes de encontrarlos con facilidad, hayamos nuevas presentaciones, nuevos colores del mismo producto, como en estos tomate cherry que ahora están tan de moda, por su facilidad para cultivar incluso en macetas y por su precio más elevado que los tomates considerados normales.
Tomatitos amarillos, de pera, negros o enanos cherry para disfrutar de ligeros cambios en el sabor pero al menos suficiente en su color e incluso en su textura. Es una manera diferente de presentar un plato de ensalada con más color o unas tapas con un golpe de sal y unos aceites diferentes para reforzar el sabor.
Sigo pensando que el tomate rosa y gordo de Huesca es de los que más sabor tienen, de momento, hasta que los jorobemos y los intentemos cambiar para hacerlos más guapos.