Mezclaremos con una cuchara larga de madera en una vasija de barro o cristal: tres yogures naturales junto a dos vasos de agua, una cucharadita pequeña de sal y el líquido de unas hojas de menta a las que habremos machacado antes en un mortero con algo de agua para sacarles el sabor y que colaremos a la hora de añadirlas a la bebida.
Para empezar a conocer esta bebida tal vez sea mejor empezar por una mezcla menos contundente: con dos yogures y 600 cc de agua. Será más fácil de ir acostumbrándonos a estos sabores.
Serviremos en un vaso con unos cubitos de hielo para que esté la bebida fría. El resultado será una bebida algo espesa, en donde las hojas de menta sencillamente le añaden un ligero toque refrescante.
Serviremos en un vaso con unos cubitos de hielo para que esté la bebida fría. El resultado será una bebida algo espesa, en donde las hojas de menta sencillamente le añaden un ligero toque refrescante.
También se puede añadir unas gotas de limón para que sea algo más ácido e incluso un pequeño golpe de ajo machacado junto a las hojas de menta.