Empleamos el Restaurante Arguiñano como ejemplo de restaurante aceptable de precio y de una calidad elevada en la presentación, servicio y como no, gastronomía a la altura de lo que se busca cuando se desea un buen servicio.
Les muestro ahora un plato del año 2011 (ya ha pasado tiempo) que es una crema de pochas con tacos de pollo y hongos en un menú de degustación, lo que lo convierte en un plato de pequeño tamaño, pero suficiente para disfrutarlo.
En la mesa te sirven el plato como se indica en la imagen de arriba, con unos tacos de pechuga de pollo a la plancha, unos hongos naturales y unas rodajitas de zanahoria más un pequeño toque de sal Maldon (sal inglesa en forma de escamas).
Una vez servido el plato la persona del comedor te añade la crema de pochas bien caliente. El final es un plato muy logrado si mezclamos los ingredientes, pero necesita la sal para darle el toque de sabor final.
No sirve tomarlo dejando el centro como detalle para el final. Mantiene el sabor de las pochas, naturales, a verdura fresca, suaves pero muy personales.
Un plato muy bien conseguido aunque tal vez algo clásico, pues se podría sustituir el taco de pollo por algo más atrevido, creo que a ser posible pescado o marisco.
No sirve tomarlo dejando el centro como detalle para el final. Mantiene el sabor de las pochas, naturales, a verdura fresca, suaves pero muy personales.
Un plato muy bien conseguido aunque tal vez algo clásico, pues se podría sustituir el taco de pollo por algo más atrevido, creo que a ser posible pescado o marisco.