Los chocolates con licor son un clásico, bien rellenos de alguna bebida espirituosa o bien en su propia composición. La mezcla de chocolate con el sabor potente de alguna bebida alcohólica encajan perfectamente.
Ahora Lindt ha sacado dos chocolates con alcohol, uno con licor de pera y otro con licor de cereza. De momento para Centroeuropa, pues en España ambos licores no son muy reconocidos. Un buen añadido a una copa larga de medianoche.