Todo servicio debe poderse cobrar, aunque todos entendemos que algunos de ellos están incluidos en el precio del producto. Este caso es curioso y no tenemos todos los datos para asegurar los motivos. Es un restaurante gallego el que parece cobrar 3 euros por descorchar la botella que han comprado los clientes. Pero si analizamos mejor la nota, vemos que los clientes tan solo han comprado bebidas en el local que además de restaurante es una vinoteca.
Debemos entender que si se hubieran sentado a comer no se hubiera cobrado el descorche, pues se entiende inevitable este trabajo para degustar la bebida que se compra. Pero al ser un servicio que se compra para beberlo fuera del establecimiento, es más lógico que se cobre el descorche. O no. Curiosidades. De todas las formas en su carta de restaurante indican el precio que cobran por el descorche, aunque te quedes a comer un pulpo encebollado o un lomo de bonito de Burela.