23.9.12

Menú degustación para hacer en casa. Sencillos, fáciles

Veamos un ejemplo de menú degustación, para ver lo sencillo que es realizar en casa unas presentaciones que pueden sorprender para una fiesta familiar, un cumpleaños o una cena romántica. Efectivamente lleva un trabajo importante, pero la satisfacción de hacer algo diferente también es notable.

Empecemos con un sencillo aperitivo, una clásica tapa algo trabajada y acompañada con un pequeño cóctel de cava o un Martini. Un langostino pelado envuelto en becon y luego frito en abundante aceite bien caliente y puesto sobre papel absorbente para que desprenda toda la grasa que sobra y servido sobre una lámina de pan tostado.

Después abrimos mesa con unos cogollos de Tudela partidos por la mitad (o en cuatro según tamaño) con una salsa tipo cesar o de yogurt y unos golpes de queso rallado tipo parmesano por encima.

Unos simples huevos rotos (en el momento de servir) sobre unas láminas de bacalao desalado y pochado muy justo para que no se pase de punto o bacalao ahumado de sobre si no quieres complicarte la vida, que descansará sobre un fondo de patatas fritas, y sin duda sorprenderá. Si le añadimos unas láminas de trufa fresca por encima, maravilloso.

Una merluza asada al papillote en el microondas con limón y unos toques de peladura de naranja sin la parte blanca de esta, sirve perfectamente para dar entrada a la contundencia. Estamos hablando de menú degustación, así que las cantidades de cada plato deben ser escasas.

Terminaría (si es comida) con una carne asada al horno convencional con romero y tomillo. Despacito, lentamente, con sabores y unos toques de vino tinto por encima, más bien algo salada que sosa y tostada al grill por fuera en los últimos cinco minutos. Un asado debe comenzar fuerte de calor y después no más de 180 grados para que esté dos horas en el horno.

Para postre nada como un hojaldre de la zona, con nata y miel o sin ella, suave pero bien decorado con unos frutos secos o unos frutos rojos. Un helado de pistachos o de chocolate a su lado encaja muy bien.

Cuidemos el pan, debe ser de calidad y un buen vino rosado de Navarra o dos botellas una blanco de Rueda y otro Somontano tinto. Para los postres nada como servir un cava brut.