Estos precios son reales, del mercado de abastos del centro de Almería en abril de 2018, en la tierra de los invernaderos, donde el tomate de verdad está a unos precios prohibitivos.
Cuidado con las comparaciones, pues nos puede suceder algo muy parecido en todos los sitios. Los invernaderos son fábricas de crear productos de huerta. Si entras a uno de ellos, con miles de plantas de tomate en plena producción, no se huele a tomate. Si compras un tomate de estos, ya huele a tomate. Pero el precio es prohibitivo.
Un kilo de tomate "Raf" verde a 17,80 euros el kilo y el rojo a 15,80 euros multiplica casi por 10 el precio de ese tomate en mercados de Zaragoza.