No hay que asombrarse por la imagen, no es censurable, es simplemente un pastelito árabe hecho con el gusto de agradar y de que entre por la vista.
Un clásico pastel del Norte de África, con una masa de pistachos, cacahuetes y almendra, con una cobertura normal que llevaba algo de miel y unos trozos de almendra crujiente en la punta en donde le han colocado unas estrellita de chocolate.
Curiosamente de aquellos pasteles históricos, que hoy todavía se venden y fabrican en Marruecos al menos, podrían haber surgido este otro tipo que vemos abajo, que se vende en una franquicia zaragozana de frutos secos. No hay tanta diferencia, al menos en la forma y en gran parte de los ingredientes.
La repostería de los 800 años de presencia árabe en España ha ido dejando multitud de ejemplos que todavía perduran, que hicieron nuestras abuelas y que ahora venden muchas pastelerías en toda España.