Efectivamente,
cuidar la calidad no siempre es cuestión de precio, como muy bien anuncian los Supermercados Lidl. No todo lo que venden con sus marcas blancas son
excelentes, incluso en algunos casos no son comparables a los productos de marca,
pero otras en cambio te puedes encontrar con sorpresas muy agradables.
Este ejemplo
que dejo es un de ellos. Son cuatro botes pequeños de mermelada gourmet que
encajan perfectamente para cuadro veladas con unos cruasán o un pan tostado de
hogaza. Aunque en los botes ya se explica que son dos mermeladas, una salsa
dulce y un chutney, sirven perfectamente para unos desayunos con unas tostadas,
olvidándonos de que también pueden servir como salsa para unas carnes o
pescados.
Una mermelada
de manzana con café
Una salsa
dulce gelificada de frambuesas con pétalos de rosa.
Un chutney de
manzana Golden
Una mermelada
de higos con cacao.
Y por un
precio muy aceptable, incluso muy bajo comparado con este tipo de productos que
solo se puede adquirir en tiendas de gourmet.
Para
quien no lo tenga muy claro, el chutney es una confitura de frutas y/o verduras
chafadas fuerte de sabor (o más suave depende del tipo de cocina, pues se
emplea tanto en la India como en Gran Bretaña). Suele ser agridulce, picante o
dulce y se emplea para poner en pan o para salsas espesas y contundentes de
pescados y carnes. Su traducción literal y que nos explica perfectamente que es
el chutney dice: Para chuparse los dedos. Para chupar.