Cuando acudes a un restaurante buscando los menú del día a veces te encuentras con buenos platos y muy buena relación calidad precio y otras veces se termina ante menús turísticos sin gracias, sin ganas, sin profesionalidad. Hay de todo como en muchos sitios. Pero si deberíamos exigir que los menús del día fueran acorde con una calidad media para dejar en buen lugar la restauración. Todos sabemos que pagamos y qué se nos puede servir por el precio.
Os dejo aquí dos postres de un menú del día de 15 euros con bebida e IVA incluido de Sabiñánigo en Huesca. Uno es Trenza de Huesca con helado de chocolate y una base de chocolate caliente, y el otro es un puding con dos bolas de helado de vainilla sobre una base de yogurt. Como se puede ver, bien montado, con gusto y algo de trabajo que se podrían evitar en un menú económico, pero que han decidido trabajar algo más.
Ejemplos de estos son los que hay que aplaudir y los que llevan clientes a los salones, clientes además que vuelven pues no quedan defraudados.